Unos músculos centrales fuertes pueden ciertamente mejorar la apariencia de uno, además de mejorar su rendimiento en el campo deportivo y en el lugar de trabajo. Alguien con músculos centrales bien desarrollados respira más fácilmente, camina, se inclina y corre mejor y es menos propenso a las lesiones; el cuerpo está en una alineación adecuada y no se fatiga tan rápidamente. Unos músculos centrales fuertes protegen la espalda y previenen el dolor de espalda.

Cuando la mayoría de las personas piensan en los músculos centrales, piensan en los abdominales solamente, sin embargo el core incluye los músculos de la parte superior de la espalda, los glúteos y los oblicuos (a ambos lados de los abdominales). Joseph Pilates, el fundador del ejercicio, llamó a estos músculos «la central eléctrica» ya que creía que toda la energía fluye de ellos a las extremidades.

En los últimos años, Pilates se ha convertido en el centro de atención como ejercicio para los músculos centrales. Requiere concentración y centrarse en los músculos abdominales mientras se realizan los movimientos. Pilates puede hacerse con pelotas grandes y bandas elásticas, o con máquinas que proporcionan resistencia. Pilates hace hincapié en los movimientos relajados y suaves y en la respiración rítmica. Como el Pilates hace hincapié en el control y la coordinación, las personas que lo practican aprenden a llevarlo a cabo en su vida cotidiana.

Si no eres de los que se toman el tiempo para aprender Pilates, deberías realizar ejercicios abdominales al menos tres veces a la semana para mantenerlos firmes y fuertes. Siempre puedes ir al gimnasio o comprar una de las muchas máquinas de abdominales que hay en el mercado. Las del gimnasio proporcionan resistencia y soporte a tu cuello, haciendo que los movimientos sean mucho más seguros que hacer abdominales en casa.

Ten en cuenta que todo tipo de ejercicio conlleva un riesgo de lesión, por lo tanto, al iniciar estos ejercicios, debes hacer que un preparador físico o un fisioterapeuta te guíe para perfeccionar tu técnica. Se le aconsejará que empiece lentamente y que aumente gradualmente hasta llegar a su punto máximo.